Manifiesto

Un ataque contra la superficialidad.

El objetivo es la búsqueda constante. En la búsqueda está la acción y esas acciones deben estar genuinamente vivas. Para ello centraremos nuestros esfuerzos en el proceso que es más importante que cualquier resultado. Tener como objetivo un resultado nos aleja del proceso. Para conectar con sinceridad con nuestro cuerpo y nuestra mente debemos enraizarnos en el aquí y ahora, debemos estar dispuestos a hacer lo necesario para encontrar la verdad con compromiso, disciplina, paciencia y trabajo.

Nuestra herramienta, nuestro instrumento, es el cuerpo y la mente, trabajaremos desde ahí para conseguir la destreza y las habilidades necesarias para interpretar de una manera práctica, sólida y creíble. También ayudaremos a eliminar resistencias, a ser conscientes de los comportamientos y hábitos adquiridos que nos restan libertad a la hora de expresar todo nuestro potencial.

Si no conocemos las posibilidades de nuestra propia anatomía, ¿Cómo podremos entender el cuerpo de un personaje? El rol que interpretemos no conseguirá realizar ninguna acción física de la que nosotros no seamos capaces.

Interpretar es hacer, hacer para ser, implicarse en una búsqueda, envuelto en una lucha constante entre el cuerpo y la mente hasta encontrar un equilibrio entre la estructura (lo fijo, el texto) con todos sus detalles conscientemente ejecutados y la verdad (lo que ocurre aquí y ahora) llena de espontaneidad, genuina.